La historia comienza con Eddie Brock, quien ha estado lidiando con las complejidades de ser el anfitrión de Venom durante un tiempo. Venom es un simbionte alienígena que necesita un huésped para sobrevivir y, en este caso, se ha unido a Eddie. A pesar de sus diferencias, Eddie y Venom han desarrollado una relación simbiótica en la que trabajan juntos para proteger a la ciudad de Nueva York de diversas amenazas.
Sin embargo, su vida toma un giro oscuro cuando una nueva y poderosa entidad, conocida como Rex, aparece en escena. Rex es otro simbionte, pero a diferencia de Venom, parece estar en una misión destructiva y despiadada. Se alimenta de otros simbiontes y se fortalece con cada absorción, lo que lo convierte en una amenaza única y aterradora.
Eddie y Venom se ven obligados a enfrentarse a esta nueva y formidable adversidad. A medida que luchan contra Rex, se descubre que esta entidad tiene una conexión profunda con los simbiontes y parece ser el origen o la fuente de su especie. Su poder es tan abrumador que logra desestabilizar la relación entre Eddie y Venom, lo que plantea interrogantes sobre el equilibrio de su unión y su capacidad para combatir a una entidad tan poderosa.
En toda esta historia, Donny Cates explora no solo la lucha física entre Venom y Rex, sino también la lucha interna de Eddie. Además, se profundiza en el pasado y la historia de los simbiontes, arrojando luz sobre su naturaleza y origen en el Universo Marvel. Esta exploración enriquece el mito de Venom y agrega una capa de complejidad a la narrativa.
Ahora bien, aparte de enfrentar a Rex, Eddie Brock también se encuentra con otros personajes significativos en la historia. Uno de ellos es Dylan Brock, el hijo de Eddie, quien tiene habilidades inusuales que lo vinculan a los simbiontes. La relación entre Eddie, Dylan y Venom se desarrolla a lo largo del cómic, y la dinámica familiar agrega un elemento emocional y conmovedor a la trama.
Asimismo, mientras la batalla continúa, Eddie se enfrenta a una serie de decisiones difíciles. La lucha contra Rex no solo se trata de detener una amenaza, sino también de confrontar su pasado y las consecuencias de sus acciones anteriores como Venom. La línea entre héroe y villano se vuelve borrosa, lo que cuestiona la naturaleza de la moralidad en un mundo de superhéroes y antihéroes.
También cabe destacar que el arte de “Venom: Rex” es impresionante y evocador. Los artistas a cargo de la serie logran capturar la esencia de la acción, la emoción y la tensión en cada viñeta. Los diseños de los personajes, en especial las transformaciones de Venom y Rex, son visualmente impactantes y añaden un elemento terrorífico y asombroso a la narrativa.