La perspectiva de la influencia literaria que se refleja en las películas de Luis Buñuel es abordada en profundidad y con un cierto deleite en este libro “La Mirada de Buñuel”. Su autor Víctor Fuentes analiza la filmografía de Buñuel y establece un diálogo y afinidad con el objeto de investigación.
El prólogo del texto está escrito por Javier Herrera, el director de la Biblioteca de la Filmoteca Española y representa un paso adelante en la trayectoria de Víctor Fuentes en sus trabajos anteriores sobre Buñuel, que son referencias obligadas para el estudio de su etapa mexicana.
En esta ocasión “La Mirada de Buñuel” abarca toda la trayectoria del cineasta y converge en algún punto remoto e inaprensible con la mirada de Buñuel. A pesar de declararse ágrafo en varias ocasiones, Buñuel también expresó su deseo de ser escritor si no fuera cineasta.
El libro fue publicado por la editorial Tabla Rasa en el año 2005 en la ciudad de Madrid, tiene una extensión de 384 páginas y está escrito en idioma Castellano, cuenta con una encuadernación en tapa blanda. Tiene unas dimensiones de 14.61 x 2.54 x 21.59 cm y su número de ISBN-10 es 8496320138 y el ISBN-13 es 978-8496320130.
Un diálogo entre la soledad del escritor y la colaboración del cineasta
Desde su posición como destacado cineasta, manifestó repetidamente su nostalgia por la magnífica soledad del escritor, una experiencia que también vivió al escribir sus guiones. Dentro de la unidad de opuestos que caracteriza su obra, se puede decir que Buñuel fusionó la escritura y la cinematografía y su cámara tiene una calidad literaria.
La importancia que Luis Buñuel otorgaba al trabajo de escritura del guion, al punto de afirmar que la película prácticamente estaba terminada una vez finalizado este proceso, resalta su dimensión como cineasta y escritor.
Sin embargo, es necesario considerar la dependencia que confesó tener respecto a sus co-guionistas como Dalí, Luis Alcoriza, Julio Alejandro y Jean-Claude Carrière, quienes a menudo han sido injustamente eclipsados, como si fueran simples acompañantes del obstinado genio aragonés en la planificación audiovisual de sus influencias literarias y en la creación de su universo cinematográfico, que es tan onírico y literario como enraizadamente empírico, siempre filtrado por la imaginación.
En lugar de buscar la soledad Buñuel parecía preferir el diálogo, ya que demostró que la confrontación estimula la creación mucho más que el egocentrismo al que son propensos los autores literarios.
La interacción entre escritura y representación
Es importante destacar que el imaginario de los escritores literarios es de naturaleza muy diferente al del cineasta, quien no escribe para ser leído, sino para ser llevado a escena, representado y reinterpretado.
En el trabajo del adaptador y de todo guionista, se encuentra la esencia misma de la reinterpretación de lo que se escribe. En contraste con la imagen del escritor aislado, Buñuel se apoya en los autores literarios y en sus co-guionistas, quienes actúan como puentes que lo conectan con la realidad.
Es necesario ajustar la imaginación a elementos concretos, como un actor real con su físico y acentos, un plan de trabajo, un presupuesto y las locaciones.
Si bien es audaz tomar al pie de la letra la metáfora de que la película está casi terminada desde el guion, esta afirmación menosprecia el trabajo de actores, escenógrafos, directores de fotografía, montadores y todo el equipo artístico que da vida a una película.
Esta actitud se relaciona más con la arrogancia del vencedor que con la humildad del perdedor, características que se reconcilian en la extraordinaria personalidad de Buñuel.
Las raíces literarias en la obra cinematográfica de Buñuel
Además de estas reflexiones y considerando todas las soledades compartidas, sincronías y disfunciones del proceso de escribir en colaboración, que eran habituales en Buñuel como guionista, el universo literario que se encuentra recurrentemente en su obra, como director y cineasta por encima de todo, es minuciosamente explorado y analizado en este excelente trabajo de Víctor Fuentes “La Mirada de Buñuel”.
La mitificación de personajes es una parte inherente al estudio de la historia y la cultura, Así como el cine y la literatura eligen protagonistas para representar la vida y proyectar en ellos los valores que admiramos en los seres humanos.
La dedicación de muchas horas de estudio de la vida de otra persona a menudo conduce, a partir de la elección de un objeto o sujeto de estudio, a un síndrome de mitificación.
Esto implica un diálogo no solo intertextual, sino también reverencial que busca comprender, interpretar y justificar el significado inherente a la obra artística. Es difícil prescindir de este cordón umbilical, que resulta insoportable cuando se trata de una biografía aduladora o una crítica complaciente.
Sin embargo, este no es el caso en este recorrido por el imaginario del artista, se afianza en referencias explícitas que revelan un mundo enigmático de polifonías y obsesiones.
Un análisis detallado de “La Mirada de Buñuel”
“La Mirada de Buñuel” es como un museo encarnado en figuras vivas, que evoca la idea del museo imaginario de André Malraux, mencionado por Víctor Fuentes, en este punto resulta extremadamente difícil resistirse a la fascinación.
El cuarto trabajo de Víctor Fuentes sobre Buñuel analiza las raíces literarias del cineasta, enlazadas con referentes claros como lo fueron Cervantes, Clarín y Galdós entre los clásicos españoles; Arniches y Gómez de la Serna entre los contemporáneos así como la novela gótica inglesa y francesa del siglo XIX, el psicoanálisis y el movimiento surrealista, que también ejercieron influencia.
En su imaginario literario “La Mirada de Buñuel”, se definen las tres principales corrientes que convergen en Buñuel que son el realismo español, el surrealismo francés y la reflexión teológica descreída e iconoclasta.
El autor detrás de “La Mirada de Buñuel”: Víctor Fuentes y su destacada trayectoria
Víctor Fuentes es un eminente autor y experto en literatura española en los Estados Unidos, tiene un doctorado en Lenguas y Literaturas Romances de la Universidad de Nueva York. En la Universidad de California, donde fue profesor emérito, ha ocupado los cargos de catedrático y catedrático de literatura española (siglos XIX y XX).
Además de muchos otros libros, es autor de Benjamín Jarnés, La canción material y espiritual de César Vallejo y La marcha al pueblo en las letras españolas (1917–1936).
Biografía y meta ficción; Buñuel, cine y literatura (Premio Letras de Oro, 1988), Buñuel en México; Antología de la poesía bohemia española; ediciones críticas de La Regenta y de Misericordia; Antología del cuento bohemio español, y “La Mirada de Buñuel”: Cine, literatura y vida.
En general es considerada una obra esencial para comprender el cine de Buñuel sin prejuicios ni clichés, a través de un análisis riguroso y fundamentado que no agota la interpretación de su cine, sino que nos proporciona una idea de su inmensa dimensión.
En este caso, la información alimenta la incertidumbre, que es una característica esencial del cineasta más reconocido del cine español.