Juana Sánchez González, una publicista de profesión y escritora de corazón, ha logrado un notable avance al compartir sus vivencias personales con el propósito de asistir a otros, evitando transformarlo en un típico libro de autoayuda.
Esta paradoja se hizo realidad cuando decidió relatar su historia a lo largo de los años 2018 y 2019. El resultado de esta necesidad de expresar su experiencia como redactora se plasmó en el libro “Diario de una redactora peculiar”.
Las experiencias que marcaron la vida de esta alicantina fueron dos inseparables compañeros que ejercieron un gran protagonismo y moldearon su carrera profesional. A pesar de que las vivencias como redactora la llevaron siempre fuera de Alicante, algo que para ella resultaba complicado debido a la necesidad de viajar, esto se convirtió en un impulso positivo.
Esos viajes a lugares como Sevilla para un curso o a Madrid para participar en jornadas la ayudaron a superar el miedo gradualmente. Gracias a su empeño por ser escritora, logró vencer obstáculos y enfrentar el desafío de montar en avión, tren y otros medios de transporte.
La Odisea de una Redactora
El libro trata sobre la vida de la autora, que es una redactora enfrentando problemas comunes y algunos inusuales. La trama se centra en la idea de una redactora que un día se siente como una meretriz de las letras, a pesar de haber soñado desde niña y adolescente con ser una escritora de renombre y no simplemente redactar textos sobre temas comunes como piscinas.
En su lucha por escribir ese libro, se enfrenta a diversos obstáculos como malos jefes, enfermedades que parecen más glamorosas en las películas, sus propias inseguridades y personajes excéntricos como políticos, actores y colegas de trabajo que no aprecian la buena redacción.
“Diario de una redactora peculiar” también relata cómo una agencia la llamó para una entrevista tras enviar un anónimo con su número de teléfono, siguiendo el juego de una campaña que habían lanzado en la ciudad.
La autora asegura que escribir el libro fue sencillo, ya que simplemente plasmó la idea de una redactora que aspira a más. Aunque no se considera elogiando su propia obra, ha leído una recomendación en Amazon, aunque enfatiza que está prohibido escribir opiniones sobre tu propio libro en esa plataforma.
Aventuras de una Escritora
Los viajes relacionados con su trabajo se convirtieron en una especie de terapia de choque para que Sánchez pudiera superar el obstáculo que la impedía salir de casa.
Por eso su libro “Diario de una redactora peculiar”, narra sus experiencias mientras intenta convertirse en redactora, siempre desde la perspectiva de alguien que vive con agorafobia (fuerte temor al encontrarse en lugares donde resulta complicado salir o donde no se puede contar con asistencia.).
Esta obra “Diario de una redactora peculiar”, muestra el recorrido de una redactora que aspira a ser escritora, revelando su anhelo y al mismo tiempo, la frustración de querer escribir para sí misma, a pesar de ejercer la profesión de redactora y escribir para los demás durante muchos años.
En honor a una promesa que le hizo a su padre antes de su fallecimiento, Juana Sánchez González decide plasmar sus vivencias en un libro propio, firmado por ella misma. El escrito, que fue auto publicado, incorpora un alter ego que la ayuda a relatar sus experiencias y situaciones.
La autora considera que no necesita inventar nada, ya que sus más de 15 años de experiencia como escritora le permiten contar en primera persona lo que significa anhelar ser escritora pero quedarse en el papel de redactora.
Tanto la vida real de Juana como su relato ficcional, comparten un elemento en común, además de abordar la perspectiva de la fobia el humor negro, que se convierte en un hilo conductor frente a una situación que limita en todos los aspectos.
Juana entre Columnas, Errores Ortográficos y Sorpresas en Madrid
Juana, la redactora, se siente atraída constantemente por trabajos que no llegan a concretarse y considera que algunas personas a su alrededor parecen sacadas de una obra de ficción. Aunque anhela tener una columna en un periódico, la vida le depara sorpresas inesperadas.
Un jefe con problemas en su ortografía
En una mañana de domingo, mientras revisaba los textos de su jefe plagados de errores ortográficos, decidió enviar un correo a un programa de radio. Para su sorpresa, recibió una pronta respuesta y una invitación para aprender en Madrid. En la capital, tomaría clases con un reconocido periodista y viviría experiencias surrealistas en el hostal donde se hospedaría.
Las ventajas de no ser famosa para una redactora
Para esta redactora, no tener presencia en los medios ni en YouTube no representa un obstáculo. A pesar de ello, logra entrevistar a un actor galardonado con un Goya y a un político (a quienes admite tener alergia) en una entrevista bastante absurda. Sin embargo, lo que quedará grabado en su memoria será un correo electrónico de un destacado comunicador del país.
Cumpliendo con sus clientes, la redactora finalmente decide publicar “Diario de una redactora peculiar”, ya que comprende que no necesita una trama elaborada. Su propia vida y las peculiares personas que ha conocido les proporcionan material suficiente para una novela donde rinde homenaje a esos escritores que probablemente nunca obtendrán un millón de seguidores en Twitter.
Búsqueda de Reconocimiento Literario
El libro tiene una edición realizada por la editorial Independently Published en abril de 2019. Está escrito en español y tiene 262 páginas en formato de pasta blanda. Los números de identificación son ISBN-10 1096068958 y el ISBN-13 978-1096068952, cuenta con unas dimensiones de 15.24 x 1.65 x 22.86 cm.
A pesar de no haber logrado un libro éxito de ventas ni obtener un puesto relevante en un medio de comunicación, la autora recibió innumerables promesas y ha estado cerca de obtener reconocimiento por su trabajo.
Anécdotas de una Redactora en la Noche
La autora revela que mientras dedicaba sus noches frente al portátil después de atender a sus clientes, iban surgiendo más anécdotas y curiosidades sobre cómo llegó a la decisión de ser escritora en lugar de optar por otra profesión.
Sus sesiones de escritura se extendían hasta altas horas de la madrugada, a veces hasta las 2 o las 3 a.m. Aunque este tipo trabajo suele ser anónimo, la presencia en internet puede llevar a situaciones tanto surrealistas como gratificantes. Por ejemplo, recibir un encargo para escribir en una revista porque leyeron su blog.
Con “Diario de una redactora peculiar”, tal vez puedas sentirte más orgulloso de ser escritor. La autora resalta que no se creó con el objetivo de darte consejos sobre escritura persuasiva o cómo redactar el mejor artículo, su intención es compartir con el lector las experiencias que viví alrededor de su trabajo.
“Diario de una redactora peculiar”