Esta catástrofe griega está considerada como una de las superiores proyectos de Eurípides. Se conoce que fue representada por primera oportunidad en 431 antes de Cristo en la edición 87 de las Olimpíadas con tres proyectos bastante más de las que no se tienen más registro que sus nombres y temas. De estas 4 proyectos, solo Medea de Eurípides sigue con vida hasta nuestro tiempo.
Género
Esta obra es lo que se conoce en literatura como una catástrofe griega. Este término no define un tipo de obra en concreto sino los temas que inspiran la obra. Esto pasa porque ese mismo término varía en relación de la etapa o historia. Lo que comúnmente la define es que alguno de los individuos tiene un final trágico en la trama.
Narrador y personajes
Medea es exclusiva en visto que el creador, Eurípides, utiliza tres puntos de vista diferentes. En las primeras páginas de la historia, Medea habla en primera persona. No obstante, mientras avanza la obra, ella empieza a comentar desde diferentes puntos de vista, variando los estilos de narración. Después Eurípides pasa a integrar además a una tercera persona. La existencia de un criterio fluctuante le proporciona un sentido de singularidad a la obra.
- Medea: princesa de Colchis que aniquila a sus propios hijos luego de que su marido la deja.
- Jasón: marido de Medea, un enorme ídolo que impulsa la venganza de Medea cuando se casa con Glauce.
- Glauce: la novedosa mujer de Jasón, la princesa de Corinto a quien Medea aniquila con veneno.
- Creón: el padre de Glauce, el rey de Corinto, que muere tratando socorrer a su hija.
- Egeo: rey de Atenas que le da a Medea un refugio seguro antes de darse cuenta de su venganza.
- La enfermera de Medea: quién distribución el prólogo de la obra. Sus intranquilidades por los jovenes presagian la desaparición de estos.
- Niños: hijos de Medea y Jasón quienes son descritos como tontos y ajenos a la intriga que los circunda.
- Tutor: es el instructor de los hijos de Medea y otro ciervo de la vivienda.
- Coro de mujeres corintias: mujeres de la región de Corinto. Medea consigue su lealtad sacando un voto de silencio. Observan cómo se desarrollan los horribles eventos, pero no interfieren.
Relación título-contenido
En Medea de Eurípides el encabezado es el nombre de la personaje principal. Esto tiene bastante sentido para ser una catástrofe griega. Medea es el personaje primordial y quien ocasiona todos los males que esta clase de obra representa.
Resumen y Sinopsis
Cuando Medea revela que Jasón la dejó y se casó con Glauce, la hija de Creón, ella jura una venganza terrible. Su enfermera, aunque quiere a Medea, admite que una amenaza espantosa en este momento se cierne sobre Corinto, porque sabe que Medea no va a dejar pasar el insulto sin una terrible venganza. Teme fundamentalmente por los dos hijos de Medea, puesto que ella tiene dentro a sus hijos en el odio que en este momento siente por su padre.
El resentimiento de Medea incrementa todavía más cuando Creón, al darse cuenta de su voto, ordena que ella y sus hijos sean expulsados de Corinto. Con un plan ya en cabeza, Medea convence al rey de permitirle solo un día más para prepararse y elaborar a sus hijos para el viaje. Ella ya decidió la naturaleza de su venganza; El exclusivo inconveniente que queda es un espacio de refugio luego.
Entonces Egeo, el rey de Atenas y amigo de Medea, hace aparición en Corinto. Él le da un espacio de refugio de sus contrincantes en su reino. Así, Medea se afirma un refugio, inclusive luego de que Egeo se entera de los hechos que próximamente cometerá en Corinto.
Cuando las mujeres corintias la visitan, Medea les cuenta su plan, pero solo luego hacerlas jurar misterio absoluto. Al inicio, considera matar a Jasón, su princesa y Creón, y después escapar con los jovenes. No obstante, luego siente que la venganza va a ser más dulce si Jasón vive para padecer bastante luego. Por ello Medea tiene planeado matar al rey, a su hija y a sus propios hijos.
Ella llama a Jasón y finge que lo perdona reconociendo al fin la justicia y la previsión que había demostrado al casarse con Glauce. Ella le pide perdón y le pide que le permita enviar regalos para la novedosa novia, como señal de su arrepentimiento. Jasón, totalmente engañado por su supuesto cambio, expresa su exitación por la inteligencia tardía que está exponiendo.
Medea saca una túnica espectacular y un filete de oro pero los unta con una sustancia mortal. Poco luego, un mensajero llega a Medea y le dice que huya. Una sección de su plan tuvo triunfo. Luego de que Jasón y los jovenes se van, Glauce se viste con su fantástica túnica y su cuerpo entra en contacto con la sustancia, el filete y la bata se aferran a su cuerpo y le queman la carne. Cuando Creón y ve a su hija retorciéndose en el suelo, intenta levantarla, pero él mismo está contaminado por el veneno. Su muerte es tan agonizante como la de ella.
Mientras, Medea se enfrentamiento entre su amor por sus hijos y su odio hacia Jasón, entre su deseo de venganza y las órdenes de su instinto maternal. Luego de deleitarse con el relato del mensajero de las muertes de Creón y su hija, ella entra a su casa con los jovenes y cierra la puerta. Mientras las mujeres corintias están indefensas afuera, escuchan los chillidos de los jovenes mientras Medea los aniquila con una espada.
Jasón hace aparición ansioso por llevarse a sus hijos para que no sean asesinados por los seguidores de Creón por haber traído los terribles regalos. Cuando se entera de que Medea había matado a sus hijos, se regresa loco de mal. Mientras golpea furiosamente las puertas de la vivienda, Medea hace aparición de repente arriba, manteniendo los cuerpos de sus hijos muertos y arrastrada en un carro que Helios, el dios del sol, le había enviado.
Jasón la maldice y le suplica ver por más reciente vez a sus hijos mientras Medea se broma de él. Ella le dice que su mal va a ser grande, pero se mitiga con la tiernicidad de su venganza. El auto, halado por dragones alados, transporta a Medea a la montaña de la diosa Hera donde entierra a sus hijos. Después viaja a Atenas, donde va a pasar el resto de sus días.
Análisis
Medea de Eurípides examina la delgada línea entre el cariño y el odio. La naturaleza apasionada de Medea contrasta con el accionar griego relajado y racional de Jasón que lo realiza parecer frío comparando. La dramatización de Eurípides de esta leyenda comunmente se considera un estudio psicológico del personaje primordial profundizando en verdades incómodas sobre la pasión, el asesinato y la maternidad.
Eurípides se encontraba fascinado por las mujeres y las contradicciones del sistema griego de género. Su régimen del género es el más exclusivo que está en las proyectos de algún escritor griego obsoleto. El alegato de apertura de Medea al Coro es la afirmación más elocuente de la literatura griega tradicional sobre las injusticias que les suceden a las mujeres. Además admite que la posición de las mujeres, y su subordinación a los hombres, es inextricable desde el núcleo mismo del orden popular en Grecia.
Frases
- “La naturaleza nos hizo a las mujeres ineptas para el bien, pero artesanas hábiles de las maldades todas.”
- “Yo entiendo qué delito tan enorme voy a osar, pero en mis elecciones impera la pasión, que es la más grande culpable de los males humanos.”
